El trabajo de seguimiento de los osos que FAPAS está llevando a cabo en los territorios de las comarcas de Omaña y Luna donde a su vez desarrollamos el proyecto de Alerta Osos en el Colmenar ha permitido identificar  un número de  ejemplares que nos permite considerar que esta área al sur de la Cordillera cantábrica, tiene ya consolidada por completo  y de  forma estable una pequeña población osera.

A grandes rasgos este sería el territorio donde hemos centrado el trabajo de seguimiento de osos coincidente con el que FAPAS lleva a cabo de protección de colmenares.

La técnica empleada  que nos ha dado la información está basada en la realización de recorridos en los cuales se pueden identificar indicios de presencia,  toma de muestras genéticas u observaciones directas.

Pero principalmente, la información fiable ahora, hasta tener más adelante información genética, es la que aportan los equipos fotográficos. En base a ello, podemos estimar que   este territorio ha tenido la presencia de  13 ejemplares diferentes de oso.  Algunos, muy aquerenciados ya a estas montañas, por sus continuos avistamientos en  zonas diferentes del área de trabajo.

Estos trece ejemplares estarían  diferenciados en:

 2 crías de dos años de edad

2 Jóvenes sub adultos, posiblemente de 3 años de edad

2 hembras  con capacidad reproductora, pues  estaban seguidas de machos

1 hembra quizás más joven, con dificultad para definir si estaría con capacidad reproductora o no. Las hembras pueden tardar hasta 6 años en reproducirse, algunas pueden hacerlo más jóvenes.

El resto, 6 machos. Dos al menos adultos y 4 ya con mayor edad que un sub adulto  de tres años.

En todo el año no se identificó ninguna hembra acompañada de crías nacidas en el año 2024, lo que nos indica que la reproducción aún no es totalmente estable en el área de trabajo.

Hembra que se pasea por casi todo el área   de trabajo en las dos comarcas.

La identificación de ejemplares para conocer si  son diferentes,  nos basamos en unas características que tienen muchos de los osos, que son las marcas o collares, normalmente a los lados de la parte posterior del cuello, en ocasiones en el cuello por delante. Así que a fuerza de tener muchas imágenes podemos llegar a identificar con bastante certeza a los ejemplares para diferenciarlos entre ellos.

Oso con una pequeña mancha triangular  al final del cuello.

Este otro ejemplar vemos como la mancha y el collar es mucho más grande  pasando por encima del cuello a ambos lados.

Un territorio se considera que ya tiene una población estable de osos cuando hay hembras reproductoras en él. Aunque en el año 2024 no hemos podido identificar ninguna con crías del año, no quiere decir que no la haya, aunque el seguimiento ha sido intenso  y de haberla, lo razonable es que la hubiéramos localizado.

Pero la presencia de  jóvenes es un buen indicador. Con seguridad ellos están recorriendo  el territorio identificando lugares donde han estado con anterioridad con su madre.

Aquí vemos  a   dos de los osos,   con toda seguridad hermanos, que  se han localizado y que por suerte fueron descubiertos de día, permitiendo obtener  imágenes de buena calidad.

DAÑOS EN COLMENARES CERRADOS  POR FAPAS

Durante el año   2024, no hemos recibido ninguna comunicación en el sentido  de que algún oso  haya entrado en alguno de los colmenares que FAPAS ha protegido en la comarca de Omaña.

Perspectivas para el año 2025

Por la información obtenida en el seguimiento de los osos el pasado año, podemos prever que este año habrá muy posiblemente presencia de alguna hembra reproductora acompañada de sus crías.  Ello dará lugar a la presencia de los machos que las rondan, además de la posibilidad de que alguna hembra joven entre en celo y acentúe más la insistencia de machos a entrar en estos territorios.

En el año 2025 pretendemos incrementar la protección de colmenares en esta comarca, ya que  aún vemos que hay colmenares que tienen problemas con el oso. Para ello vamos a aplicar también un nuevo sistema de protección que hemos diseñado y que    ya hemos probado en Asturias,  evitando que el oso entrase en colmenares  donde los sistemas de protección no habían funcionado correctamente.

Viendo la evolución de la población osera y como se está asentando en estas comarcas,  es  totalmente necesario que todos los colmenares se encuentren  correctamente protegidos y  con una vigilancia constante  que garantice que  los sistemas eléctricos funcionan correctamente.

Esta información ha sido enviada a los miembros del grupo de Whatsapp ALERTA OSOS EN EL COLMENAR

PROYECTO REALAIZADO CON EL APOYO DE: