Pese a ello, el Gobierno de Asturias ha iniciado una campaña para arrastrar  al resto de Comunidades Autónomas con población lobera para que esta especie no sea declarada   protegida argumentando la eficacia  de su modelo de gestión del lobo.

 

Lo que no aclara el Gobierno de Asturias, como  el resto de Comunidades Autónomas, es porqué se ha llegado a esta situación y por la que consideran que hay que regular la población de lobos.

LA GESTIÓN DEL LOBO EN ASTURIAS PROPICIA LOS ATAQUES DE LOBOS A LA GANADERÍA

Ningún Gobierno Regional explica las razones por las que efectivamente hay  un nivel de daños de lobo a la ganadería inusual, especialmente en Asturias con presencia de lobos en entornos muy humanizados, donde  llama poderosamente la atención la presencia de ejemplares   metidos literalmente en los pueblos.

Recordamos la intervención de FAPAS para esclarecer  daños en ganado doméstico  en una zona de Asturias donde no se reconocía la presencia del lobo y por lo tanto no se pagaban las indemnizaciones a los ganaderos afectados. Era el año 2017.

¿Qué hacen lobos solitarios matando ganado en el interior de los pueblos?

La noticia, hacía referencia a un hecho que  durante los últimos años ha alarmado a la población de muchos núcleos rurales  de Asturias que  se encuentran con la sorpresa de tener lobos merodeando, atacando gallinas, comiendo perros  o literalmente metidos  entre las casas   buscando alimento.

Para entender esta situación se necesita información y conocer qué está sucediendo con la población de lobos. De lo contrario, la realidad de los daños de lobos en entornos rurales lleva a la conclusión de que  la población de lobos es exagerada, encontrandonos ante una superpoblación que parece lógico  reducir para  disminuir a su vez los ataques al ganado..

DESESTRUCTURACIÓN POBLACIONAL Y DISMINUCIÓN DE CARROÑAS

El lobo no está en peligro de extinción,  lo que está en riesgo de desaparición es la estabilidad poblacional en el conjunto de los grupos familiares o manadas. La estructura  social entre territorios, su defensa y  la capacidad de vivir en ecosistemas con  capacidad de  tener presencia de manadas  que se alimentan en gran medida de la captura  de presas vivas salvajes y del  consumo de carroñas, sin necesidad de presionar de manera constante sobre el ganado doméstico.

Esta desestructuración se  lleva a cabo desde hace años, bien legal o ilegalmente mediante la caza. Antes cuando se permitía matar lobos que  se localizaban en  batidas a otras especies cinegéticas y  se miraba para otro lado. Ahora es la guardería quién elimina lobos a ciegas por orden del Gobierno Regional, se trata de alcanzar cupos de captura, sin más.

Un grupo familiar de lobos  come de una carroña  encontrada en el monte. El Gobierno de Asturias se negó durante  más de  diez años a aplicar la Ley que permitía el abandono de carroñas en el monte, fuente de alimentación natural de la fauna salvaje durante cientos de años.  Esta negativa estaba vinculada a mantener el jugoso negocio lucrativo del la recogida de  ganado muerto y su transformación en subproductos a través de empresas públicas vinculadas al propio Gobierno Regional.

Hoy día, pese a que la  nueva normativa permite el abandono de carroñas en la naturaleza, se mantienen  férreos controles de retirada de  cadáveres que deberían  de quedar en la naturaleza, en especial   los que se producen  en los pueblos en épocas de invierno.

Esta situación promueve en la población de lobos el incremento de ataques al ganado. Disminución de recursos tróficos directos a causa de la  disminución de carroñas y desestructuración de manadas por disminución de ejemplares abatidos aleatoriamente  que con un menor número de individuos se ven obligadas a  seleccionar presas de captura de menor dificultad. Disminuye la proporción de capturas de   animales salvajes y se incrementa  la  captura de ganado doméstico.

SARNA

La población de lobos  en Asturias presenta un gran número de ejemplares afectados por  sarna sarcóptica, una enfermedad parasitaria que provoca graves lesiones  en los ejemplares afectados con consecuencias sociales  que  a falta de  estudios profundos, parecen generar situaciones de expulsión de la manada.

Una loba  detectada por la cámara de FAPAS, presenta  una importante  afección de sarna. 

Los lobos suelen superar esta enfermedad, pero durante meses la sufren con consecuencias poco conocidas. Hemos visto ejemplares  siguiendo a la manada,   buscando alimento en los despojos que deja el resto del grupo familiar. Otros parecen vivir  en solitario. ¿cómo se alimentan?.

Hemos detectado   lobos afectados por sarna y paralelamente daños   en entornos rurales, ataques a  ovejas en prados entre las casas,  captura de gallinas o simplemente avistamientos  desde los pueblos, alarmando a los vecinos con su presencia.

¿LOBOS VÍCTIMAS DE PROGRAMAS CIENTÍFICOS?

Y ya por último como venimos denunciando, la presencia de lobos con restos de trampas en el cuello y  con patas rotas.  Coincidentes  estos últimos casos  con la realización en Asturias de un trabajo de investigación que implica la captura de lobos   para   trabajos  científicos.

En estas  condiciones, resulta inevitable valorar la verdadera situación de lo que sucede con los ataques de lobo al ganado.

Nadie niega que el lobo genera daños, pero  el incremento de ataques  no  está  relacionado para nada con un supuesto incremento de la población de lobos, sino más bien  con el modelo de gestión que se está aplicando sobre el conjunto de la población salvaje.

El Plan de Gestión del Lobo en Asturias, como posiblemente el de otras Comunidades Autónomas se aplica en función de los resultados de la gestión en conjunto de la  biodiversidad,  entre los que se  encuentra  la gestión cinegética de la especie o  como es el caso de Asturias, llevada a cabo por funcionarios. Una  gestión ciega e indiscriminada que lleva a la muerte aleatoria de ejemplares.

El resultado de este modelo aplicado hasta hora obtiene el resultado contrario al pretendido que es el de tratar de disminuir los ataques del lobo al ganado doméstico.  Es evidente que los incrementa  aumentando  cada vez más la crispación entre el sector ganadero que  alejado de una formación científica, como el resto de la sociedad no es capaz de interpretar lo que está sucediendo con el lobo.

El Gobierno Regional de Asturias carece de ningún tipo de credibilidad para tratar de posicionarse como un modelo de gestión del lobo eficaz para disminuir los ataques  al ganado doméstico. Careciendo de ninguna   legitimidad para cuestionar los criterios del Ministerio de Transición Ecológica para  incluir al lobo   en la LESRPE y dar pie a una gestión ordenada ya basada en criterios técnicos, científicos y no políticos en la población de lobos en España.

 

INFORMACIÓN DOCUMENTADA

 

La opinión sobre el lobo, lo que sucede  y  cómo solucionarlo es  motivo de  cientos de opiniones, motivo por el que consideramos que es necesario  escuchar la opinión de personas  que trabajan en la investigación con los lobos, un mundo en donde también hay opiniones  de lo más diversas.

Entrevista al biólogo Angel M. Sánchez, coordinador del Voluntariado Nacional para el Censo del Lobo Ibérico.