La aparición en España del  “gusano del corzo”  Cephenemyia stimulator ha afectado en los últimos años hasta a un 70% de la población de  esta especie. Ahora comienza a recuperarse.

 

 

 

Su disminución en la Cordillera Cantábrica  ha sido muy importante. No conocemos datos exactos, pero desde el FAPAS hemos podido comprobar la práctica desaparición del corzo de muchas zonas de montaña al  dejar de estar presente en las miles de fotografías de fauna que cada año se obtienen con las cámaras automáticas.

 

Pero esta incidencia negativa del parásito que causa la muerte de los corzos, parece estar remitiendo y precisamente lo podemos comprobar al  revisar las cámaras y ver que el corzo comienza de nuevo a ser fotografiado y en algunas áreas con mucha frecuencia.

 

Lo singular de esta recuperación es que  se produce en territorios con una presencia estable de lobos.  Si valorásemos las consideraciones de muchos expertos sobre la negativa influencia que los lobos tienen para la conservación de la fauna  cinegética, se debería de valorar que precisamente  una situación de estrés poblacional con una pérdida importante de ejemplares, sería una circunstancia ideal para provocar la extinción  a causa del efecto predador del lobo.

 

Pero no ha sido así. No solo  no ha llegado a exterminarse, sino que evoluciona favorablemente. ¿Cómo debemos de preguntarnos que ha influido la presencia del lobo, precisamente en esta recuperación?.

 

Lamentablemente, el Gobierno Regional de Asturias durante los últimos años ha promovido el oscurantismo informativo. Impedido la investigación científica del lobo y condicionado la conservación de los procesos ecológicos de los territorios a un manejo rudimentario basado en matar todo lo que le estorbaba.

 

Pero aun así, podemos intuir que el  lobo ha tenido una gran influencia en la recuperación del corzo, eliminando los ejemplares enfermos y frenando la propagación del parásito. Y  pese a la  baja tasa de reproducción a causa del escaso número de ejemplares  supervivientes, la presencia del lobo no  está impidiendo la rápida recuperación de  determinadas poblaciones de corzos que habitan  en las montañas cantábricas.

 

Vídeo. Ejemplares de corzo grabados en zonas loberas de Asturias.

Las cámaras del FAPAS no engañan,  eso sí, molestan.

 

 

CORZOS EN HÁBITAT DE LOBOS from FAPAS on Vimeo.                                        PRÓXIMA PUBLICACIÓN DEL FAPAS