Plantando para un futuro con urogallo.
En las montañas de la Cordillera Cantábrica, una pequeña acción con voluntarios de “La Caixa”, pero importante en la estrategia de una futura recuperación del urogallo, especie que está desapareciendo de un hábitat que posiblemente sea necesario reforzar si en un futuro se lleva a cabo alguna reintroducción, o se produce el milagro de la recuperación de la ya escasa población que ocupa el norte de la península ibérica.
Plantar pino silvestre.
En pequeños rodales, tal como se está haciendo con gran éxito en los Pirineos, pero que en la zona cantábrica, ni tan siquiera se ha planteado “por los expertos” como una posibilidad de trabajo en beneficio del urogallo.
Una sola bandeja con pinos silvestres, es suficiente para crear un rodal. Alejado de los criterios reforestadores de la Administración que cuando se plantea acciones, tiene que ser a gran escala, con maquinaría y alterando el suelo.
En nuestro trabajo, vale el pequeño esfuerzo de una niña plantando su pino silvestre, pasando sobre el terreno como si casi no lo hubiéramos pisado.
Al finalizar, ha quedado plantado nuestro rodal de pinos, solo hay que dejarlos crecer.
Y con EDP, una lección de lucha para prevenir incendios.
Lo normal, es que para evitar incendios, las máquinas arrasen el monte creando amplios espacios sin vegetación, de manera que el fuego pueda ser controlado y no se quemen los pinos que normalmente y a millones se plantan, una y otra vez detrás de cada incendio.
Con los pinos quemados de fondo, nuestra estrategia no es limpiar el terreno y dejarlo sin vegetación, al contrario, plantarlo de manera muy intensa, pero con especies que favorecen la humedad del suelo y actúan igualmente de cortafuegos ante un incendio.
Varios cientos de abedules han sido plantados por lo voluntarios de la empresa eléctrica EDP.
¿HAS PLANTADO YA TU ÁRBOL ESTE AÑO?