La osa Sarousse es uno de los ejemplares muerto a tiros por un cazador en Aragón recientemente, y junto con la aparición del oso Cachou  muerto por envenenamiento en el Valle de Arán,  ha hecho saltar todas las alarmas sobre la protección de esta especie en las montañas pirenaicas.

ORGANIZACIONES DE ESPAÑA Y FRANCIA UNIDAS

Esta semana,   ongs de ambos países, hemos enviado al Comisario de Medio Ambiente de la Unión Europea un escrito en el que se solicita la máxima atención por la protección de esta especie y que se pongan en marcha mecanismos  para sustituir los osos muertos por otros ejemplares.

Este es el escrito y las ONGs que  se han unido en la defensa del oso.

La Biopolítica impide la unión de las ONGs cantábricas

Después de  varias decenas de osos muertos en la Cordillera Cantábrica,   la posibilidad de unidad de acciones como ahora vemos que está sucediendo en Pirineos, no ha sido posible.

El intento de monopolio de la conservación del oso de una Fundación que ni tan siquiera se encuentra entre las firmantes en Pirineos, lleva  año tras año impidiendo  una unidad de acción.

Como se autodefine,  entidad biopolítica,  cada vez que aparece un oso muerto trata de monopolizar la atención, trata de desmontar  otros criterios que no son los que le interesa defender y especialmente, dadas sus relaciones políticas con las Comunidades Autónomas, toma partido por la defensa de los intereses políticos de los cuales depende para sobrevivir como ONG.

Solo con dar un vistazo a los logotipos de todas las entidades  que nos hemos unido para enviar  el escrito al Comisario  Europeo de Medio Ambiente, es fácil descubrir   a que ONG nos referimos.

Menos biopolítica y más defensa del oso pardo en España.