Ayer nos fuimos a la comarca leonesa de La Omaña, un magnífico territorio donde los apicultores explotan un recurso natural como son las flores para obtener una miel de alta calidad y donde FAPAS ha comenzado a trabajar el año pasado en el seguimiento osero y en la Campaña de Prevención de daños de osos en colaboración con la Reserva de la Biosfera de los Valles de Omaña y Luna.
El oso es cada vez más frecuente en esta comarca al sur de la cordillera Cantábrica. Las cámaras de FAPAS ya han podido detectar a alguno de los ejemplares que se acerca en busca de alimento entre los colmenares de los apicultores. Proceder a protegerlos y enseñar cómo son los métodos más eficaces, es ahora nuestro trabajo.
El colmenar que hemos protegido se encuentra cerca de la localidad de El Castillo. Son pequeñas instalaciones y en concreto esta ya fue “pasada por las zarpas” de nuestro amigo el oso el año pasado.
Un pequeño colmenar para explotación particular de la miel cuyo propietario alarmado por la presencia de los osos estaba dispuesto a abandonarlo, no viendo posibilidad de protegerlo.
Así que se lo protegemos y no solamente va a abandonar la explotación, sino que ahora va a poder instalar más colmenas.
Comenzamos el trabajo clavando las varillas metálicas que formarán el cierre perimetral del colmenar. Es un sistema que FAPAS utiliza ya desde hace años en sus propios colmenares y donde la experiencia nos da una alta fiabilidad de eficacia para evitar daños de oso.
Poco a poco el cierre se va construyendo hasta que todo el colmenar queda bien protegido.
No todo va a ser trabajo, un alto para recuperar fuerzas. La mañana comenzó fría, con cinco grados bajo cero.
Y finalmente, para dejar constancia del trabajo, Monchu, el cámara del FAPAS, graba unas imágenes que servirán para alguno de nuestros documentales.
Este proyecto cuenta con la colaboración de: